En 2017 pasé 8 días con Popeye. Una experiencia agria que quiero contar en esto corto hilo (1/6) 
Me contrataron desde Rusia como productor para un documental sobre su vida. Los rusos querían entender por qué un exsicario de Pablo Escobar era una figura adorada por algunos los colombianos, ¿por qué, por ejemplo, era un "youtuber" exitoso?
Pronto me di cuenta de que #Popeye era un palabrero profesional, un agitador, un culebrero especializado en #PabloEscobar y que ganó prestigio a punta de cuentos sobre plomo y sangre. El primer día tiré la toalla a los rusos…
Les dije que no podía hacerlo, que emocionalmente me estaba costando. Ese primer día habíamos caminado el Centro y la gente se le aventaba para abrazarlo y pedirle autógrafos y selfies. Yo veía todo y no lo creía. Me costó explicarle a los rusos lo que estaba pasando.
Los rusos estaban con una doble sensación: por un lado, tenían las imágenes perfectas, pero, por otro, estaban paralizados. Nos reunimos en un hotel por la noche y acordamos entrevistar varias de sus víctimas y tratar que su relato bajara en protagonismo. Esa era mi tarea.
No estoy seguro si al editar el material los rusos finalmente entendieron la fascinación por Popeye. En lo personal fue devastador, pero me ayudó a acercarme a la realidad de las víctimas del narcotráfico que siguen en la trastienda de nuestra historia.
De esa vivencia nació narcotour.co una de mis mejores experiencias como profesor universitario y que @EAFIT dejó morir hace un par de años. 😢 Fin
