[HILO] A propósito del hilo que hice sobre la “paciente 31”, pude mirar más en detalle el caso de Corea del Sur. Para mi sorpresa no han tenido que recurrir al lockout. Sin embargo a diferencia de otros países, supieron utilizar las tecnologías de la información a su favor. 
En los primeros días de propagación las autoridades fueron muy eficaces en localizar potenciales contagiados a través de rastreo de personas y de clusters. Haciendo seguimiento a los movimientos de tarjetas de crédito o a través de cámaras de seguridad lograron dar con ellos.
Cuando la situación recrudeció (a propósito de la paciente 31) tuvieron la capacidad de hacer 20 mil test rápidos por día, incluyendo testeos a autos de civiles para identificar síntomas. Per cápita lideran en el mundo con 300 mil test realizados (En UK sólo se han hecho 64 mil).
Si no has leído el hilo sobre la paciente 31, lo dejo a continuación:
Una app para smartphones -financiada por el Estado- permite informar la actividad del #COVIDー19 en tiempo real, permitiéndole a la ciudadanía cumplir con el aislamiento social de forma efectiva. Además de SMSs enviados por el Ministerio de Salud advirtiendo una amenaza cercana.
La clave sin duda ha sido la capacidad de identificar a portadores asintomáticos del #COVIDー19 lo que ha permitido adelantarse y aislar a estas personas. De paso haciendo innecesaria una medida más extrema como un lockout.
Otro punto a favor es qué, pese a ser profundamente capitalista en lo económico (recordar Parasite), su sistema de salud es universal y con alta calidad en infrastructura, equipos y profesionales. Un punto de inflexión fue la experiencia con el Coronavirus MERS el 2015.
¿Chile debería enfrentar la situación como Korea? Con un sistema segregado por la capacidad de pago, con autoridades egolatras y sin apertura al diálogo, con un sistema de salud estatal precario y cero inversión en I&D, se ve muy complejo de implementar.
Hoy el lockout parece ser urgente. Ya sabemos de una primera persona fallecida y todo indica que vendrán más. Hoy los datos apuntan a que vamos derechamente a parecernos más a España o Italia, que a Korea del Sur y eso asusta.
