Althusser tuvo la virtud de reivindicar la cientificidad de Marx en el "continente de la historia". Ahora bien, fue nefasto al mutilar El Capital y, por tanto, fue incapaz de descubrir el aspecto dialéctico en Marx, desde su juventud hasta su obra cumbre.
En Marx hay una dialéctica (de raigambre hegeliana) desde los Manuscritos Económico-Filosóficos hasta El Capital pasando por El Manifiesto Comunista. No haber entendido esto es no haber entendido la coherencia y la preocupación de Marx.
En los Manuscritos Económico-Filosóficos hay un primer movimiento dialéctico: la inversión del papel del sujeto y del objeto de la Modernidad. Marx se da cuenta muy rápidamente de que con la explotación económica el sujeto (humano) se convierte en objeto (producto).
Por eso ahí desarrolla todo el análisis sobre enajenación/alienación: el sujeto (humano) queda cosificado en el objeto (de su trabajo), a pesar de que ese objeto (lo trabajado/producido) sigue siendo parte del sujeto, solo que se ha olvidado (enajenación/alienación).
En El Manifiesto Comunista sigue habiendo un segundo aspecto dialectico: la lucha de clases. Y aquí sigue estando la sombra de Hegel, más concretamente, el Hegel de la Fenomenología del Espíritu.
En Hegel teníamos la dialéctica del amo/siervo, en Marx tenemos una dialéctica que ya no es solo de reconocimiento entre amo y siervo en abstracto e ideal, sino que es colectiva, material, social, de lucha y de clase. Segundo momento dialéctico clave en Marx.
Ahora viene el tercer momento clave en la dialéctica de Marx, el de El Capital. ¿Qué ocurre para que Althusser no se dé cuenta de ello? Pues simple y llanamente que él recomendaba no leer el capítulo de Marx que hablaba de ello: el del fetichismo de la mercancía.
En el capítulo sobre el fetichismo de la mercancía tenemos al Marx maduro, el que le gustaba a Lenin, donde se unen las tres fuentes del marxismo: la filosofía alemana, el socialismo francés y la economía británica.
¿Cuál es el fetichismo de la mercancía con el capitalismo? Que el origen del valor (económico), que es la fuerza del trabajo (la clase trabajadora), ha desaparecido aparentemente y solo ha quedado visiblemente su producto, que es la mercancía.
Es el mismo planteamiento del Marx de los Manuscritos Económico-Filosóficos, solo que han cambiado las herramientas y la profundidad de análisis: ahora tenemos una radiografía completa de la sociedad burguesa (la sociedad del mercado del capital).
El aspecto dialéctico sigue estando subyacente aquí: la mercancía, que aparentemente es un objeto, enmascara que es el resultado del trabajo vivo, aunque en su forma social aparenta ser algo que no tiene que ver con su origen: la clase trabajadora.
Justamente es aquí donde Marx critica la economía de su época (la economía británica), porque enmascara la riqueza y el origen de la fuente de valor y deja más desposeída (metodológica y socialmente) a la clase trabajadora frente a la clase del capital (la burguesía).
Pero no solo acaba aquí este tercer momento dialéctico de Marx. Nos va a apuntar otra cosa: el capital se convierte en un nuevo sujeto, que solo busca valorizarse a sí mismo, en un movimiento continuo, donde el resto de objetos y sujetos quedarán supeditados a él.
Por eso, la única salida que ve Marx es desmontar toda la relación sujeto/objeto de la Modernidad y de su mercado, diciendo que aprendamos a ver siempre que la economía y su mercado solo son relaciones sociales. Movimiento dialéctico máximo que supone revolución y comunismo.
Una pena que Althusser rechazara todo el arsenal interesante de Marx. Una pena que el estructuralismo al modo de Althusser solo fuera la antesala del posmarxismo, una de las peores lacras anticomunistas y también antimarxistas.
Y mando una copia de este hilo improvisado y demasiado veloz a @jerborejuo.
