Thread by @FalaciaDelDia

Hace semanas publiqué este trino. Algunos me acusaron de exagerar, de infantilizar, de crear una generación de cristal. Me refería en concreto a motivación intrínseca para aprender y al esfuerzo del profe al enseñar, así que abro hilo para ampliar la idea

https://twitter.com/FalaciaDelDia/status/1382825688156147717

Este hilo podría ser la continuación de este otro, en el que reflexiono sobre corregir o señalar errores ajenos, algo bastante común en twitter para descalificar opiniones contrarias, pero también algo esencial para la labor como profe. Bien pueden leer:

https://twitter.com/FalaciaDelDia/status/1265805223718772741

Ahora sí, al punto. Recibí críticas frente a estar formando una generación de cristal que no tolera la crítica ni la menor frustración y resulta traumada incluso con un pequeño revés en un entorno controlado como un salón de clase. Luego no sabrán enfrentarse al mundo real.

Ahí se configura una falacia de espantapájaros, pues de fragilidad no va el asunto. Voy más allá de los posibles detrimentos en la autoestima del estudiante y me concentro en el objetivo global del proceso educativo, en la razón para que allí estén profe y estudiante, trabajando:

Se trata de APRENDER. Para eso es que profes, estudiantes, familias, instituciones y gobiernos gastan dinero, tiempo y se esfuerzan de diferente manera. Eso es lo que persiguen, y la meta de APRENDER es lo que debería justificar todo el trabajo que se hace. Porque sino, ¿Pa qué?

Me gusta la metáfora "empujar una pared" para algunas clases que hemos tomado en nuestra vida: Aquella materia a la que dedicamos horas de clase, de estudio y de tareas para al final resultar completamente irrelevante en nuestras vidas y tener la certeza de que no aprendimos nada

Empujamos esa pared, quedamos cansados y la pared no se movió. ¿No habría sido más sensato no haber empujado la pared si el resultado al final iba a ser el mismo (no se movió)? ¿Haber usado todas esas horas, presupuesto y energía en algo más productivo, divertido o gratificante?

Podríamos suponer que sí, que es lo más sensato (En economía y en proyectos se toman decisiones con ese criterio). ¿Pero cuál es el lío con nuestra indeseable materia del ejemplo? Que inicialmente no sabemos que estamos empujando una pared, de eso solo nos daremos cuenta al final

y cada estudiante tendrá su propia pared, no siendo la misma para todos. Así que como docentes tenemos la oportunidad (y la responsabilidad) de evitar que nuestra materia se convierta en la pared que ellos empujarán sin ningún resultado más allá de quedar frustrados y hastiados.

En mi cuenta @HablaDivertido me suelen preguntar si es posible aprender un idioma con canciones. Yo respondo que sí… siempre y cuando amen esas canciones tanto como para repetirlas docenas de veces, pues su uso como recurso que va más allá de escucharla mientras se lee la letra

"Solo se ama lo que se conoce". Pero también, solo aprendemos algo si realmente lo amamos, porque ese amor (En su sentido más amplio) es el que le dará sentido y pertinencia al esfuerzo que debemos dedicar a aprender. Es el que nos hará madrugar o trasnochar para estudiar...

Es el que nos hará sacrificar una fiesta o un paseo para mejor dedicarnos a estudiar, o gastar nuestro dinero en un libro y no en rumba, o decisiones semejantes. Pero ese amor no nace de la nada, y es ahí cuando necesitamos a un buen profesor: Él nos puede enseñar a amar su área.

Si fracasamos al aprender un área que sentimos como “una pared para empujar”, es porque no nos enseñaron a amar ese conocimiento. Nuestro infortunio fue haber dado con 𝘫𝘶𝘴𝘵𝘰 𝘦𝘴𝘦 profesor que no nos cautivó. Hice este sondeo. Resultado muy claro:

https://twitter.com/FalaciaDelDia/status/1383117522891866115

Segundo (y este es un tema para un hilo larguísimo, así que apenas lo tocaré): Para aprender tenemos que estar motivados. Desafortunadamente hay profes que lo malentienden y creen que tenemos que estar 𝘦𝘯𝘵𝘳𝘦𝘵𝘦𝘯𝘪𝘥𝘰𝘴, que motivar es jugar, hacer rondas y chistes.

La didáctica que yo aprendí (y con la que trabajo) tiene como indicador de motivación "Tomar la decisión voluntaria de aprender", y para llegar a ese punto, el camino puede ser muy diferente a uno divertido. Por ejemplo: Decidir aprender a nadar porque "una vez casi me ahogo".

No querer pasar de nuevo por esa experiencia puede ser suficiente motivación para seguir allí, entrenar, quizá madrugar, y hacer el trabajo tedioso (por ejemplo, trotar) que viene adicional al divertido (por ejemplo, chapotear con amigos, jugar en la piscina o la playa).

Naturalmente, para motivar a alguien a aprender a nadar no necesitamos exponerlo a experiencias cercanas al ahogo, pero sí a que logre tener el conflicto entre "Tengo certeza de que no sé" y "Tengo claro que necesito saber". Ahí se presenta una disonancia cognitiva

Y la manera de resolverla es tomando la decisión de aprender y recorrer el camino. Mi experiencia como profe me ha mostrado que si no se ha pasado por este punto, no hay garantía de aprender pues en cualquier momento se abandonará el proceso y nunca se querrá hacer trabajo extra

Y aquí volvemos a la imagen del comienzo. ¿Qué hay allí de malo? ¿Acaso no puede haber un chiste aquí y allá para distensionar el ambiente y motivar a estudiantes que a veces se aburren? Claro, puede haberlos, pero si al final eso no lleva a amar la materia, será esfuerzo perdido

El problema entonces no es solo para el estudiante. Es también para el profesor: Él mismo se puede estar saboteando la meta de lograr que sus estudiantes amen su materia (y a partir de allí, aprendan). Está haciendo de su materia "una pared para empujar"

https://twitter.com/FalaciaDelDia/status/1382825688156147717

Y así como el estudiante no sabe cuál materia será al final la pared que habrá empujado durante años, el profesor tampoco sabe de manera anticipada cuál de sus estudiantes verá su materia como tal pared y cuál se enamorará de ella. Así que tiene que tratar de enamorarlos a todos

Y una buena manera de ir detectando esos enamorados es a través de las preguntas que formulan, aún desde la más honesta ignorancia y desconocimiento. En una pregunta puede estar implícito el deseo de no quedarse con esa duda o de no estar satisfecho con una respuesta dada.

Así que a responder para que se enamoren, no para relajar el ambiente con unas risas. No para que desistan de todo intento de preguntar en el futuro. No para que le cojan repulsión al área o al profe mismo. No queramos ser para ellos "esa pared" ni quien los manda a empujarla.

Y hasta aquí el hilo de hoy, pero atentos que hay ñapa

(Por cierto, si les gusta mi contenido (Videos en youtube, Hilos twitter, artículos en Wordpress) y quieren apoyarme para seguir creándolo, pueden hacer lo a través de:

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Ñapa 1: Corto video en el que presento el curso de vicios de argumentación que ofrezco para quienes recién se acercan al tema y quieren mejorar sus competencias argumentativas. son 12 horas, horarios a concertar entre los participantes.

Ñapa 2: Hilo que recopila todos los hilos que he creado y los videos que he publicado sobre argumentación:

https://twitter.com/FalaciaDelDia/status/1228697575399788545

Ñapa 3: Ya pueden seguirme en Facebook, por si quieren compartir mi contenido en aquella red social. Esperen pronto este hilo en versión artículo del blog. Estén pendientes.

Ahora sí, fin del hilo. Nos vemos en el siguiente
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Ñapa 4: Este hilo, mejorado y ampliado, ya está en mi blog. Bien pueden pasar a leer:
lafalaciadeldia.wordpress.com/2021/05/04/cor…