Los abuelos, enfadados, impusieron lo del reparto equitativo. Ante esta situación, uno de los niños tiró parte de su botín de mala manera
Las niñas reunieron todo lo conseguido (casi la totalidad), hicieron 4 partes y repartieron entre ellas
Los niños se quedaron en otra, muy enfadados hasta que alguien propuso jugar a la Nintendo.
Niños y niñas no volvieron a hablarse en toda la tarde.
Cada cual que saque sus conclusiones.
Fin