Poco a poco dejó de ser bienvenida en las casas de las compañeras y en los eventos comunitarios, sociales y no.
Cesaron todo contacto por un par de meses, pero como Daniela era indispensable en lo que hacía,
Los castigos y limitaciones se hicieron cada vez más severos.
Salzman fue quien sugirió un castigo más severo. Raniere entonces llamó a la madre de Daniela, quien le había pedido reducirle algunos rigores a su hija, y le dijo que no sólo no lo haría,
Stay tuned; continuará mañana.