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1. Hace 5 días comencé con una sospecha, y los acontecimientos de ayer lunes reforzaron poderosamente mi suspicacia: Hay algo que se está transformando en nosotros como sociedad, y me temo que al gobierno de López no le va a gustar. Ahí les va...
2. Entre jueves y viernes hubo bloqueos en la carretera México-Querétaro que desquiciaron el tráfico. Ayer, una fuerte manifestación de feministas que protestaron por la indolencia criminal del gobierno de la CDMX en el caso de una violación cometida por policías.
3. No es la primera vez que este tipo de cosas suceden por acá. De hecho, esa siempre ha sido la rutina: ¿Tienes demandas que hacerle al gobierno? Anda, ve y fastidia a la CDMX. ¿Estás molesto por algo? Protesta y revienta cuantos cristales puedas.
4. Los citadinos estábamos tan acostumbrados a eso que, literalmente, llegó un momento en que perdimos la capacidad de desarrollar empatía con los manifestantes. De hecho, el resultado más frecuente era todo lo contrario.
5. Hace mucho que perdí la cuenta de las veces que llegué a escuchar comentario tipo "mugres campesinos, por mí que les echen a los granaderos para que les rompan el cráneo; sus demandas me importan un carajo...".
6. Se abusó tanto de la protesta en la CDMX que se llegó a una situación verdaderamente peligrosa: Hubo momentos en que la ciudadanía habría estado dispuesta a tolerar niveles brutales de represión gubernamental.
7. La pésima estrategia de los manifestantes y la nula capacidad de los gobiernos en turno para reaccionar, provocaron que realmente estuviéramos a un tris de convertirnos en un país tolerante con la brutalidad policíaca.
8. El resultado final ante cada movilización masiva o protesta o bloqueo siempre era el absoluto hartazgo de la ciudadanía, y el rencor abierto contra los protestantes o manifestantes. Pero en los últimos 5 días algo cambió.
9. Este fin de semana hubo gente que se quedó atorada en el tráfico de la carretera México-Querétaro durante 9 o 10 horas. Sin comida. Sin agua. Con niños en el coche. Hubo quejas contra los manifestantes, pero por primera vez la mayoría de las quejas fueron contra el gobierno.
10. Lo mismo hubo reclamos por la incapacidad del gobierno para poner orden, que críticas hacia la torpe política presidencial que tiene en el abandono a los campesinos. Y ayer con la manifestación de feministas en el centro de la CDMX pasó algo similar.
11. En otras ocasiones, esa manifestación habría recibido fuertes críticas por la agresividad a la que se llegó en ciertos momentos. Pero no ayer. Todas las críticas fueron, casi por unanimidad, contra el gobierno de Claudia Sheinbaum. Y contra ella misma, por supuesto.
12. Me sorprendió ver que colectivos feministas y opositores de derecha estaban literalmente en la misma frecuencia. Sus críticas iban dirigidas hacia el mismo punto. Su indignación era prácticamente la misma. Había momentos en que la situación me parecía irreal. De no creerse.
13. La dupla López-Sheinbaum ha logrado lo que ningún otro gobierno logró: Unificar en su contra a amplios sectores de la población, muy disímiles además de todo. En mi casi medio siglo de vida es la primera vez que veo tanta disposición ciudadana a apoyar la protesta.
14. Y no es porque nunca hubiera sucedido algo similar. El abandono del campo no es de hoy, sino de siglos. Y la violencia contra las mujeres -sobre todo desde el gobierno o la policía- tampoco. Son problemas que no se inventaron ayer, ni la semana pasada.
15. Sin embargo, tal parece que todas las idioteces hechas por el actual gobierno de la Transformación de 4a, han provocado que la sociedad tenga cada vez menos paciencia. Y ojo: Lo lograron en 8 meses. Todo un récord.
16. Los defensores incondicionales del régimen se están encapsulando, refugiando en sus trincheras. Pero su propaganda cada vez tiene menos éxito en el resto de la población. Esto le va a doler al gobierno, pero a mí me pone optimista.
17. Una de las razones por las cuales la oposición venezolana nunca pudo combatir a Chávez-Maduro, fue porque siempre estuvo divida. El riesgo en México es el mismo: Una oposición no cohesionada no podría combatir a López y su gansolandia.
18. Pero López y su gente hacen tanta tontería, tan rápido y con tantas ganas, que parece que van a lograr unificar a la oposición. Sobre todo, a nivel de ciudadanía. Así que déjenme soñar que en 2021 vamos a mandar a Morena a su casa y le vamos a quitar el control del congreso.
19. Al ver las reacciones generalizadas por situaciones como la de ayer, me atrevo a soñar con que la pesadilla lopezobradorista sólo va a durar 6 años, y luego podremos enterrar el nefasto recuerdo de López, Attolini, Gibrán, Noroña, Citlali, Dolores, Irma, el DrDr., y demás.
20. No olvidemos que la Historia nos enseña que los regímenes autoritarios y populistas son auto-destructivos. Pero tampoco olvidemos que duran menos si como sociedad damos la cara y los confrontamos.
