Thread by @periodistan_

Día triste e histórico en Omán, en donde estoy ahora.

Falleció el Sultán Qaboos, líder del país en los últimos 50 años, un hombre muy querido.

Les voy a contar un poquito sobre él.

1) Estábamos ayer en la ruta con mi amigo omaní, escuchando la radio.
“Declararon alerta roja en Muscat, la capital”, me dice. “Debe ser por las tormentas”.

Quedó ahí.
Y a la noche, leyendo las noticias, entendimos.
De todas formas, no se imaginan lo que está lloviendo...

2) Omán es un país pequeño, 4,6 millones de habitantes, Este de la Península Arábiga.
Limita con Yemen (en guerra), Arabia Saudí y los Emiratos.
Más de 2 millones de expatriados hindúes (India, Pakistán y Bangladesh): llegan por los -mucho- mejores salarios.

Ah, y son ibadíes.

3) Ése es el dato clave.

En el mundo musulmán, existe una división muy importante: sunnitas y chiítas.
Los omaníes, sin embargo, pese a ser islámicos, no son ni la una ni la otra: son ibadíes.
Y eso les ayuda a no verse arrastrados por grandes disputas de poder en la región.

4) El gran legado de Qaboos, según los propios omaníes, es ése: tranquilidad y neutralidad.
Omán incluso suele oficiar de mediador en los conflictos de la zona, que no son pocos.

Todos respetan su rol pacífico; por eso, la muerte del Sultán se lamenta mucho en el mundo musulmán.

5) “Estuve en Europa, pero no me gustó: muy insegura”, me dijo un hombre estos días.

Mi 1er día en Muscat fuimos a la playa: dejamos teléfonos y llave del auto en la arena y empezamos a caminar. Volvimos 3 horas después, 8 de la noche, ya casi sin gente.
Todo en su lugar.

6) Índice de «incidencia terrorista» en Omán: 0
Tasa de asesinatos: casi inexistente.

Otro datito: está prohibido construir edificios de más de 4 pisos en el país; el Sultán quería mantener la apariencia de la región, no convertirse en una nueva Abu Dhabi o Dubai.

7) Las casas, además, deben pintarse con ciertos colores, por ley: no muy chillones; mucho blanco, cremita, ocre.
«Nos gusta así, nos gusta la tranquilidad, vivir una vida sin sobresaltos».

A la opulencia de sus vecinos, Omán le opone la sensación de vivir en “la Arabia real”.

8) Mucha de esa impronta tiene que ver con el sello de Qaboos, cuya familia paterna era de Sohar, Norte, y la materna de Salalah, al Sur.

Si alguien se pregunta por su tono de piel oscura es porque su mamá tenía raíces zanzibaríes.
Claro: Zanzibar era parte del Imperio Omaní...

9) La isla de Zanzibar hoy es una de las dos partes de Tanzania, país africano, junto a la región que antes se conocía como Tanganica.
De hecho: TANganica + ZANzibar = Tanzania.

Pero quién haya ido a Zanzibar lo habrá visto muy claro: es todo mucho más árabe que africano.

10) La historia del Imperio Omaní es completamente desconocida en nuestros países (y es lógico: ellos tampoco conocen el Imperio Inca).

Pero supo ser muy grande e importante: partes de Yemen, Irán, los Emiratos, Somalía, Tanganica, Zanzibar, Kenya, Mozambique, Saudi y Pakistán.

11) El Imperio era muy poderoso en el mar, en una zona en la que Inglaterra y Portugal tenían muchísimas pretensiones.
Hubo muchísimos choques; guerras, invasiones. En 1515, sólo 23 años de la llegada de Colón a América, los portugueses tomaron Muscat.

Torre de São Jõao, 2020.

12) El Imperio Omaní duró hasta el Siglo XIX.

Un dato curioso: en 1833, el país firmó acuerdo comercial con EE.UU. Siete años después, el barco Al-Sultanah desembarcó en New York.
Era la 1ra vez que emisarios árabes llegaban al «Nuevo Mundo».
Causaron sensación entre la gente.

13) Los omaníes fueron recibidos por el presidente Van Buren.
Llevaron de regalo marfil, dátiles, alfombras persas. Los norteamericanos los recibieron como estrellas.

Fue hace menos de 200 años, un abrir y cerrar de ojos en la historia.
Cómo cambia el mundo...

14) El hilo era para hablar de Qaboos y me fui por las ramas. Pero vuelvo: hoy el país amaneció triste.

Hay problemas, sí, e importantes (desempleo, por ej), pero no hay omaní que no le agradezca la paz y estabilidad que consiguió en una región compleja del mundo.
Líder querido.

15) Miren estas fotos, por ejemplo.
Omán campeón de fútbol en la Copa del Golfo de 2018: un jugador muestra su foto y todos hacen la venia.
En la tribuna, en Kuwait, un hincha también lo recuerda.

«Y no están obligados, lo hacen porque quieren, por agradecimiento».

16) ¿Y qué pasará ahora sin Qaboos? En principio, como ya les dije, lo que Omán más valora es la tranquilidad y por eso, ni lerdos ni perezosos, un sucesor ya fue elegido.

Se llama Haitham Ben Tariq, primo del fallecido, presidente del club de fútbol SIIP, líder del torneo.

17) En redes sociales, los lamentos son muchos.

El principal es que se pierde un líder de paz en la región: el Omán de Qaboos estaba involucrado seriamente en las negociaciones entre Irán y Arabia Saudí, Irán y EE.UU., e incluso en el conflicto palestino-israelí.
QEPD.

18) El próximo hilo será deportivo, volvemos a las raíces: uno de los pocos deportes del mundo considerados Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.

Un «trance místico» en ese país que ni nombro, porque ya causa polémica.
¡Abrazo y buen finde para todo/as!

19) Ah, y ya que hablé de Zanzibar, un datito que me olvidaba y que seguro vario/as ya conocen.

A los locales mucho no les importa, ellos escuchan taarab, y no rock: pero igual, qué locura que el inmenso Farroukh Bulsara haya nacido allí, en una casita de la Stone Town...