Thread by @RafaelPoulain

Pongan atención que hoy les voy a contar la historia de Christopher Johnson McCandless, un hombre que quiso vivir totalmente de la naturaleza y vean cómo le fue.

Cristopher nació el 12 de febrero de 1968, en Annandale Virginia, su padre, Walt McCandless trabajaba para la NASA y ahí conoció a la que sería su esposa, Wilhelmina Johnson que le ayudo a montar su propia compañía consultora.

El matrimonio tuvo dos hijos, Carine y Chris, nuestro protagonista.
Carine cuenta que sus padres eran buenos proveedores y hasta divertidos pero también llegaron a ser crueles y abusivos.

Walt era un bebedor que tenía arrebatos constantes de violencia, pero para la gente que los conocía eran un matrimonio normal, ambos hijos se graduaron de la secundaria y años más tarde ingresaron a la universidad, Chris se graduó de historia y antropología.

Su sueño era abandonar los títulos que la sociedad te daba y vivir en solitario, empezó a cumplir su sueño en 1990 cuando donó su herencia de 24,000 dólares a una organización de caridad y empezó a viajar por EE.UU.

A partir de ahí se hizo llamar “Alexander Supertramp”

Empezó a desarrollar una filosofía la cual muchos admiran pero también en su búsqueda de conectarse con la naturaleza, se ponía en riesgo y preocupaba a su familia.

Trabajaba en granjas de Arizona, California y Dakota del Sur, pasando por momentos de estabilidad y por momentos de incertidumbre como cuando en un diluvio perdió su automóvil, o cuando en canoa bajó el río colorado y llegó al Golfo de México.

A pesar de que estaba cumpliendo su sueño él quería más. Quería alejarse de la civilización convencido de que su conocimiento del mundo salvaje le ayudarían a sobrevivir, en unión con la naturaleza, comiendo semillas, frutas y lo que pudiera sembrar.

Chris quería enfrentarse y al mismo tiempo unirse a la naturaleza y empezó a escribir un diario donde narraba sus progreso espiritual y físico.
Su plan era irse a un lugar recóndito y en abril de 1992 decidió que ese destino sería Alaska.

Hizo autostop hasta Fairbanks Alaska, ahí conoció a James Gallien que lo llevó a Stampede Trail, ambos platicaron acerca del plan de Chris y al final Gallien le dijo que absurdo, comprara equipo adecuado o no sobreviviría pero Chris insistió en que se haría uno con la naturaleza

Gallien insistió pero fue inútil, Chris seguió con su plan

Empezó a caminar en los linderos del bosque y empezó a adentrarse en él, cruzó el río Teklanika y encontró a los pocos kilómetros un autobús abandonado que adaptó como residencia, su aventura empezaba con el pie derecho

Llevaba consigo una bolsa de arroz pero al poco tiempo se dio cuenta que no podía vivir de semillas y frutas que recolectaba y empezó a casar pequeños animales, comía puercoespines y alguna que otra ave, pero la comida cada vez escaseaba más.

Una vez logró matar a un alce pero la carne se le descompuso ya que no supo cómo conservarla correctamente, cada vez pasaba más hambre y, a veces no encontraba animales y regresó a su plan de volver a comer semillas y los frutos que encontraba.

Finalmente se rindió y decidió volver a la civilización, pero había un problema, el relativamente pequeño río Teklanika que lo separaba del mundo había aumentado, ahora era imposible cruzarlo y tuvo que volver a su camión a replantear su estrategia.

Sin la presencia de animales, decidió hacer una dieta basada en plantas, frutas, semillas, agua y hongos. su plan era que partir de esa dieta obtendría todos los nutrientes que necesitaba un ser humano.

Días después unos cazadores encontraron su cuerpo sin vida.

En el autobús donde murió había un diario donde contaba su experiencia y había frases inspiradas en lo que estaba viviendo, pero si tan sólo Alex (o Chris, como prefieran llamarlo) se hubiera escuchado a él mismo se hubiera dado cuenta que la felicidad radica en..

Compartir dicha felicidad
La historia de Alex se ha romantizado porque la meta era buena, pero ese es un error común

Enfocarnos en la meta y no en el camino, y a veces como a Alex el camino nos destruye

Recuerden que a veces es bueno cambiar el plan, pero nunca la meta.

Fin.

El tal Alex Supertramp fue un necio que sólo pensaba en lo que quería pero no en cómo lo quería y al final su necedad lo mato.

¿Qué dice el publico?