Thread by @ldpsincomplejos

1) NO, LA DIVISIÓN DEL VOTO NO TIENE LA CULPA
¿Por qué se ha producido ese ascenso del pacto a la frankenstein? Pues tengo malas noticias para algunos: no ha sido por la división del voto.

2) Si comparamos con las elecciones anteriores, el trifachito (incluyendo a Navarra Suma) ha perdido 21 escaños, lo que se añade al hecho de que en la legislatura anterior el frankenstein ya tenía 10 escaños mas. ¿Se hubiera podido hace algo para evitar esa caída? Veámoslo.

3) Si vemos las provincias donde Vox no ha tenido escaño, hay 12 en las que se habrían podido quitar uno al frankenstein concentrando los votos de Vox en el PP. O sea, que NO se hubiera podido evitar la debacle: aunque hubiéramos hecho eso, se habría seguido bajando 9 escaños.

4) Hay otras dos provincias (Lérida y Gerona) donde es el PP el que habría podido retirarse para que Ciudadanos obtuviera escaño. Y hay otra (Ceuta), donde si el PP se hubiera retirado en favor de Vox (que ha quedado por delante) se habría quitado otro escaño al PSOE.

5) Pero ni con esas se habría evitado bajar con respecto a 2016. Aunque se hubieran obtenido esos 12+2+1 = 15 escaños, se habría seguido bajando 6 con respecto a 2016, así que frankenstein habría ganado, de todos modos, por 22 escaños de diferencia.

6) El problema NO ha estado, por tanto, en la división, sino en la movilización del frankenstein. Comparando los votos con los de 2016:
- Trifachito ha subido unos 150.000
- PSOE+Podemos han subido 450.000
- Separatas han subido un millón de votos.

7) Si subes 150.000 votos y tu adversario sube 1.450.000, tu resultado en escaños será peor que la vez anterior, vayas junto, dividido o bailando una rumba. Trifachito ha perdido porque frankenstein ha votado más. Punto.

8) ¿Y por qué ha sucedido eso? Pues porque Sánchez ha usado a Vox exactamente igual que Rajoy usó a Podemos en 2015 y 2016: para azuzar el voto del miedo entre su electorado. Y le ha funcionado estupendamente.

9) El problema que tiene esa estrategia del miedo es doble: en primer lugar, no funciona en todos los tipos de elecciones. A Rajoy le sirvió para conservar su sillón en Moncloa, pero pocos meses antes no le sirvió para evitar que el PP perdiera todo el poder autonómico y local.

10) Y la razón es psicológica: sentir miedo de un votante de Vox (o de Podemos) abstracto es más fácil que sentir miedo de un candidato a alcalde de tu mismo pueblo y con el que te has tomado un vermú en más una ocasión. Es más fácil temer a un arquetipo que a un tipo real.

11) Veremos si Sánchez puede prolongar la estrategia del miedo hasta el 26M, pero resulta dudoso que lo consiga. Al menos con la misma intensidad.

12) El segundo problema de la estrategia del miedo es que suele ser una pistola de una sola bala. El PP la disparó en la doble elección de 2015 y 2016, pero ahora en 2019 ya no le ha funcionado. El miedo al frankenstein no ha impedido esta vez la catástrofe del PP.

y 13) Así que en las siguientes elecciones generales el PSOE se tendrá que buscar otro argumento.