“Jaque mate en cuatro jugadas”
-4ª jugada.
La convocatoria de un referéndum, con la legalidad impuesta por el TJUE, es volver al escenario previo al 1-O. La diferencia con el 1-O es que, ninguna sentencia TC daría cobertura al discurso unionista.
Los unionistas tendrán que implicarse. Tendrán que hacer campaña. Y eso le dará al referéndum, validez a nivel español. Será “caixa o faixa”.
Si se gana el referéndum, ya se tendrá la legitimidad. Teniendo la legalidad (mayoría independentista en el Parlament) y teniendo la legitimidad (50+1), ya se puede hacer efectiva la DUI. Sacarla del cajón.
-4ª jugaba bis.
Al ser un referéndum legalizado por el TJUE, da luz verde al reconocimiento de la DUI, por parte de los países amigos de la UE (esos mismos que se echaron atrás el 2-O, al no poder homologarse el 1-O) y fuerza la situación del resto de países de la UE.
El Gobierno español no tiene por qué reconocer la DUI. Puede declararla anticonstitucional. Y volvemos a la vía del artº 267 y llevar el asunto al TJUE. En ese punto ya interviene la jurisprudencia internacional, sobre todo la sentencia Kosovo.
Sentencia favorable del TJUE, con el pronunciamiento favorable, tanto del TEDH como de la ONU, fin de la partida. “Jaque mate”. Fin de la partida.
El 26-M, el exilio nos está pidiendo un voto de confianza, en su estrategia.