Thread by @RafaelPoulain

Pongan atención que hoy les voy a contar la historia de Brenda Ann Spencer.

Nuestra historia empieza el 3 de abril de 1962 en San Diego California, ese día nació Brenda, la protagonista de nuestra historia, hija del matrimonio formado por Wallace y Dot Spencer quienes presumían de tener una vida perfecta y feliz.

Pero esas sólo era apariencias, el matrimonio estaba condenado al fracaso, Wallace golpeaba a su esposa y la maltrataba psicológicamente, y Dot desquitaba sus frustraciones con su pequeña hija.

Brenda amaba jugar en el jardín, ensuciarse, reía todo el tiempo, pero, cuando Dot la veía llegar corriendo del jardín, con su pelo rojo enmarañado tras una jornada de juegos, le gritaba a su hija que esos no eran juegos de niña y que se comportara como mujer.

La pequeña Brenda no entendía por qué no podía jugar como ella quería, por qué su madre la maltrataba sólo por ser feliz y la obligaba a jugar con muñecas diciéndole que eso, era lo que se esperaba de una niña.

Entonces Brenda se empezó a volver una niña retraída.

Dejó de sonreir como lo hacía antes, sentía que todo estaba mal con ella y de amar todo de ella empezó a odiarse a sí misma, odiaba su pelo rojo, sus pecas y todo lo que alguna vez había amado y le gustaba de sí misma.

Cuando tenía 12 años, sus padres se divorciaron y Brenda y sus hermanos se quedaron a vivir con su padre, un hombre alcohólico y violento que no sabía cómo acercarse a su hija.

Entonces Brenda se volvió una adolescente rebelde, no encajaba en la escuela, no tenía amigos, su padre la maltrataba (y abusaba de ella, según la propia Brenda), y pues creció como una chica solitaria, deprimida y con problemas escolares.

Su padre se desentendía y cada que sus maestros le llamaban para que corrigiera a su hija, él decía que no la iba a obligar a nada y aunque era una chica con muy buen ojo para la fotografía y el arte, su padre nunca la apoyó y ella nunca supo cómo canalizar sus emociones.

Brenda fue arrestada por robo y por andar jugando con una pistola de aire comprimido, iba por el vecindario matando pájaros y cuando se le evaluó psiquiatricamnte, los oficiales de libertad condicional recomendaron internarla en un psiquiátrico.

Le dijeron al padre de Brenda que su hija estaba sumamente deprimida, que tenía mucha ira contenida y que era necesario cuidar de ella en una institución por un tiempo, pero Wallace no dejó que su pequeña hija se fuera.

A pesar de que sabía (y veía) que su hija estaba deprimida, sola y cada día más inestable, nunca le dio una palabra de ánimo, o se mostró empático con ella.

En cambio una tarde le preguntó qué quería como regalo de navidad, ella amaba la música, de hecho pasaba horas encerrada escuchando música en su habitación, adoraba el álbum “Outlandos d'Amour”, el disco debut de “The Police”.

Así que le pidió a su padre una radio portátil para poder escuchar música en todos lados, cuando llegó la mañana del 25 de diciembre, Brenda fue a buscar feliz e ilusionada bajo el árbol, pero no había radio.

En cambio su padre le había regalado un rifle semiautomático con mira telescópica, además le regaló varias cajas con balas calibre .22.

Entonces Brenda que pudo haber pasado sus tardes escuchando mñusica, pasaba sus tardes disparando en el campo, practicó hasta volverse una experta y constantemente leía acerca de criminales famosos y masacres históricas.

El lunes 29 de enero de 1979, Brenda estaba encerrada en su casa aburrida, no tenia ganas de nada, nadie la escuchaba, estaba harta de eso y para colmo las voces de los niños que entraban a la escuela la estaban enfureciendo (ella vivía justo frente a una escuela primaria)

Brenda se quedó absorta en la ventana viendo a los niños que se dirigían a clase cuando de pronto uno de ellos recibió un disparo por la espalda.

Brenda había explotado y la sociedad lo iba a pagar.

El director de la escuela, Burton Arthur Wragg, empezó a gritarle a los niños que se protegieran, arriesgó su vida para llevarlos tras los muros de la escuela, pero Brenda lo vio y le acribilló.

El director murió protegiendo con su cuerpo a uno de sus alumnos.

Lo mismo sucedió con un guardia escolar que murió protegiendo a los niños.

Para cuando la policía llegó, varios niños yacían en el suelo, aunque sl final sólo hubo dos víctimas mortales, (el director y el guardia)

Los oficiales pusieron varias patrullas bloqueando la visibilidad de Brenda y para cuando llegaron los equipos SWAT la cosa estaba tan tranquila que Brenda hablaba por teléfono con la prensa.

Un reportero le preguntó al padre de Brenda que por qué le había dado un rifle.

El padre respondió que porque no sabía qué hacer con su hija y pensó que con el rifle se iba a suicidar.

y aunque después se desdijo y nadie encuentra esa declaración, nadie duda de que haya sido capaz de darle el arma por eso.

Los negociadores la convencieron de rendirse y ella salió de su casa con los brazos en alto, fue arrestada y decenas de reporteros se acercaron a ella y uno le preguntó por qué lo hizo, ella lo miró con frialdad y le dijo “No me gustan los lunes…

Brenda por fin había llamado la atención de adultos y se entregó a los oficiales que registraron su casa y vieron cientos de latas de cerveza vacías y decenas de botellas de alcohol que su padre había consumido.

Les contó los maltratos que sufría y que era abusada por su padre.

Ella pensó que recibiría la atención que buscaba pero el caso se hizo mediático y prensa y sociedad no buscaban justicia sino venganza y, a pesar de tener 16 años, la juzgaron como adulto, no la escucharon y la sentenciaron a cadena perpetua

Su padre ni siquiera fue investigado.

Había gente que pedía que se investigara más a fondo el caso pero todo se olvidó cuando Un mes después del tiroteo, Bob Geldof (el que organizó el Live Aid) presentó una canción junto a su banda (The Boomtown Rats) titulada “I don’t Like mondays”.

La gente se olvidó de Brenda y se centró en la canción y decían que Geldof había buscado lucrar con la tragedia y entre que la prohibían y hacían campaña contra Bob, Brenda quedó olvidada en la cárcel.

En prisión descubrieron que tenía depresión, ataques epilépticos y una lesión en el cerebro que la hace propensa a la ira.

En el encierro le han dado medicamentos que controlan sus padecimientos.

4 veces ha pedido la libertad condicional pero se la han negado.

Ese fue el primer tiroteo escolar en la historia moderna de EE.UU.

Y quizá todo se pudo detener si una persona hubiera sido empática con Brenda.

Y bueno así termina la historia de Brenda Ann Spencer, una chica que…

Sólo buscaba que alguien entendiera que estaba triste y enojada, y su historia parece lejana, pero a veces tenemos gente así a nuestro lado, gente que busca un poco de cariño y no sabe cómo expresarlo.

Así que...

Si te sientes triste, y que estás sola o solo, quiero que sepas que no lo estás, que todo puede cambiar y siempre habrá alguien dispuesto a escucharte.

Y si no lo hace nadie junto a ti, escribe aquí en este tuit, porque aunque a veces así lo sientan, no están solos.

Fin.