El gran aumento del alfabetismo provocó una gran demanda de maestros de las escrituras para enseñar esta habilidad fundamental y la expansión del gobierno y el comercio provocó una demanda de maestros de calígrafos expertos para redactar documentos oficiales y comerciales.
Los libros impresos en letra romana, con portadas e iniciales inspiradas por los venecianos fueron muy populares por todo París. A pesar de la guerra y la censura, el espíritu humanista prendió en Francia y produjo una erudición y un diseño de libros excelente.
Geoffroy Tory escribió libros en los que: trataba de ordenar la lengua francesa, escribió una historia de las letras romanas y ofrece instrucciones sobre la construcción geométrica de las 23 letras del alfabeto latino.
Claude Garamond diseñaba con tanta perfección las tipografías romanas que los impresores franceses del siglo XVI lograron imprimir libros de extraordinaria legibilidad y belleza.
Basilea Y Lyion se convierten en centros de diseño.
Habían ilustradores de libros, sus xilografias eran escultóricas y complejas.
Granjon creó diseños muy originales, tipografías itálicas delicadas que mostraban hermosas mayúsculas itálicas con trazos ornamentales.
Habían ilustradores de libros, sus xilografias eran escultóricas y complejas.
Granjon creó diseños muy originales, tipografías itálicas delicadas que mostraban hermosas mayúsculas itálicas con trazos ornamentales.
El siglo XVII fue un periodo relativamente tranquilo para la innovación en el diseño gráfico. Había tanta abundancia de ornamentos, punzones, matrices y bloques de madera del siglo XVI, que se encargaban pocos materiales nuevos.
Cierro hilo. El siguiente hilo: Es una época de...
Cierro hilo. El siguiente hilo: Es una época de...
