Thread by @deborahciencia

El Ministerio de Sanidad va a tomar medidas contra la promoción de medicamentos en redes sociales. Han empezado a solicitar la retirada de publicaciones. Es una gran noticia.

No obstante, la situación que se ha creado me genera sentimientos encontrados.

Va hilo 👇🏻

En su día alerté sobre la promoción de estas toallitas contra el acné que muchas personas estaban aconsejando en sus redes sociales. Son un medicamento sujeto a prescripción médica, así que es un peligro recomendarlas a la ligera.

culturacientifica.com/2019/09/19/rec…

Esto está ocurriendo con otros medicamentos. No es publicidad, son recomendaciones a título individual. No obstante, según el reglamento también es una infracción.

Este asunto me genera sentimientos encontrados. Tengo ciertas líneas rojas que como profesional no pienso rebasar.

Si tengo que hacer una crítica negativa, denuncio el hecho, no a la persona o a la marca. Si le quiero hacer saber mi opinión, lo hago por privado. No quiero fomentar linchamientos públicos.

Sin embargo, en este caso se trata de un asunto de salud pública. Por eso puedo entender que parezca bien que se difunda la denuncia usando todas las armas.

Es cierto que poner en la diana a alguien famoso, con nombre y apellidos, da mucha más difusión al mensaje. Y es un buen mensaje, ojo, pero me genera un conflicto moral.

Me consta que quienes han denunciado esta situación públicamente lo han hecho como último recurso.

Primero lo han hablado en privado, luego lo han denunciado en sus colegios profesionales, ante el Ministerio... Se ha hecho bien, pero no hubo nada efectivo hasta que se emprendió una batalla mediática entre influencers sanitarios e influencers de belleza.

Esto es lo que jamás tendría que haber llegado a suceder. Algunos creen, con razón, que nadie mueve un dedo hasta que no haya un escándalo mediático montado. Esto es lo más terrible de todo y lo que quiero destacar del asunto.

Y luego también hay quien, a pesar de estar el asunto en manos de las autoridades y a pesar que que las publicaciones fuesen retiradas motu propio, sigue haciendo leña del árbol caído.

Entonces ya no sé si el problema está en que las autoridades no reaccionan hasta que la situación llega al límite, o es que aplaudimos a quien señala con el dedo para sacar partido a lo que sea.

FIN.