Thread by @leogarciamx

En las pasadas semanas, y mucho más en los recientes días, la pregunta por qué suena fuerte.

¿Por qué un grupo de mujeres que se puede pensar son inteligentes, preparadas, y sobre todo están en cargos de PODER, confronta a otro grupo de mujeres ante una exigencia LEGITIMA?

La respuesta puede ser desoladora. Se llama fanatismo.

Fanático es el que defiende de manera desmedida, irracionalmente apasionada, y con ira, su motivo de afinidad.

Aquello, o aquel, al que ha rendido su simpatía y convicción.

Por definición el fanático ejerce el motivo de afinidad, de su simpatía, con una convicción que se convierte en ira, por lo que simplemente no tolera ni mínimamente algo que le resulte adverso.

El fanatismo se ejerce de manera irracional, con una fe ciega, tanto que se aparta de la realidad.

El fanatismo no conoce limites para defender la razón de su afinidad o simpatía, sobresimplifica todo llevándolo a posturas totalmente radicales, a favor o en contra.

Por eso fanatismo y radicalización van de la mano. Quien se fanatiza no tolera puntos medios y no duda en darle sentido con todo su ser a su motivo de afinidad.

El fanatismo es radical e intolerante. Se sostiene de una causa sustentada más por el propio y personal deseo de creerla, aceptarla, validarla. Volverla verdad aunque sea mentira.

El fanático solo acepta lo que le da la razón, lo confirma, lo sustenta, lo valida, lo identifica.

Se complica y se pone delicado.

Cuando el fanatismo se ejerce en un grupo, quienes son afines a la razón que sustenta ese fanatismo ven todas sus propias acciones como virtuosas, éticas y MORALES.

Esto es especialmente notorio en el fanatismo religioso. Pero no es exclusivo.

Cualquier razón, acción, idea, PERSONA incluso, puede ser motivo de fanatización.

Para quienes lo vemos desde fuera el fanático no puede ser comprendido fuera del motivo de su fanatismo porque está más allá de la razón, de lo ético, de lo moral, de lo posible, de la REALIDAD.

Y es por eso mismo que para el fanático quién difiere de su causa, del motivo de su fanatismo, solo le queda ser repudiado, rechazado. Pero además, estigmatizado y adjetivado.

Aquí viene algo importante: la adjetivación del otro es el inicio de la deshumanización.

Si, un fanático NO VE como su similares a quienes no comparten el motivo de su fanatismo.

Por ejemplo, una mujer fanatizada por una causa, puede no considerar su similar a una mujer que esta CONTRA la causa de su fanatismo. Tal como se lee.

El fanático no ve humanidad, su propia humanidad, reflejada de manera recíproca, que sería parte de empatizar como seres humanos en una relación normal.

Pero el fanatismo rompe esa capacidad de empatía, simpatía, concordia, y resumido, le llamamos INtolerancia.

Desde una perspectiva razonada cuando un fanático niega los atributos humanos del otro que no comparte su motivo de fanatismo, ergo, niega sus PROPIOS atributos humanos.

Si, un fanático justifica LO QUE SEA a nombre del motivo de su fanatismo.

Tal vez ahora se entiende porque un grupo de mujeres, inteligentes, preparadas, con cargos de poder y responsabilidad, son capaces de rendir su lealtad al gobierno de un hombre, y defenderlo.

Pero no son capaces plena e irrestrictamente de expresar apoyo y solidaridad a un GENERO COMPLETO que tiene una exigencia legitima y válida, pero que confronta al motivo de su lealtad, afinidad, y simpatía.

Y eso permea en todo el grupo influido por ese fanatismo. El lenguaje los delata. En este caso puntual el nefasto adjetivo con que están señalando a quienes las están confrontando, los delata.

Por eso en su intolerancia les llamaron fà/këmi/nistăs

Un grupo de mujeres defienden a un gobierno, pero no expresan verdadera empatía con su genero en una exigencia que trasciende y esta arrebatando vidas.

Eso simplemente no lo pueden ver, no lo pueden entender, y no lo toleran.

Con ese adjetivo buscan desvirtuar la exigencia legitima, pero no solo eso, permite difuminar la identidad de quienes las están confrontando.

Un fanático no sabe de comparaciones ni reclamos válidos. Es motivo q basta y sobra aquello q motiva su fanatismo, por irracional q sea.

Y por eso también, cuando mucho, solo les ha alcanzado para justificar a favor de su razón de fanatismo la falacia de asociación implícita:

"Esdeque, como tiene muchas mujeres en su gabinete, ergo, es feminista".

Pero el mundo las va a oír.
¡Vaya que las va a oír!

Y las va a ver.

Y el monstruo de 1000 y un cabezas que es este disforme regimen esta enojado. Muy enojado. Así que va a gruñir, vociferar, difamar, atacar.... si, todavía más.