Aquí planteo por qué Alemán NO MERECE RESPETO intelectual alguno.
Hilo:
Un compañero de la Facultad de Ciencias Políticas y yo, entonces aún alumnos, pretendimos organizar lo que hubiera sido el primer debate en la historia entre candidatos a la Rectoría de la UNAM.
Al final, al debate sólo asistió un aspirante: el doctor Luis Javier Garrido.
Como es sabido, en julio de ese año se perpetró el crimen de la Narvarte donde fueron asesinadas varias personas.
Entre ellas, fue víctima de feminicidio la antropóloga Nadia Vera.
Era una mujer extraordinaria, talentosa, valiente.
Fue asesinada por el "delito" de ser mujer y "estar en el lugar equivocado" (su propia casa).
Para infamar a una mujer ejemplar, y con ello defender de carambola a un hampón como Duarte, sólo hay dos opciones: o se es una rata de albañal movida por dinero o se es un psicópata falsario.
Alemán dio el tiro de gracia verbal con su máquina de escribir a las víctimas de ese multiasesinato:
eluniversal.com.mx/entrada-de-opi…
Si así miente en casos de "gente común"... qué esperar de él cuando escribe sobre personajes o acontecimientos públicos.
Defenderse de sus injurias es un acto que siempre toma como "intento de censura".
Siempre va a ser preferible un marrano cínico que un hampón verbal hipócrita.
Y, si somos justos, tampoco merece el respeto personal.
Lo que ha hecho no sólo enturbia al periodismo sino que ha hecho daño deliberado a muchas personas.
Pero no se le debe creer nada. El tipo es un persistente abusador de la ignorancia de sus lectores crédulos.
La respuesta es obvia: juegan un papel político (en este caso, porril y golpista), no informativo.
Es nuestra oportunidad de mostrar a sus patrones que ya no nos van a tomar el pelo y que merecemos voces públicas de calidad.
De lo que se habla aquí es de carencia de ética y de golpismo mercenario.
Eso es inadmisible no sólo en la democracia, sino en cualquier contexto civilizado.