HILO: Hoy quiero hablaros sobre el rey de los kaijû, icono de la cultura japonesa moderna: el dinosaurio nuclear #Godzilla. Prometo opiniones completamente personales y spoilers de tipo general. 
Los japoneses escriben y pronuncian su nombre como "gojira" (ゴジラ). Viene de un juego de palabras entre "gorira" (gorila) y kujira (ballena). En el alfabeto romano se escribe "Godzilla". Los propios japoneses lo escriben así cuando aparece su nombre con nuestras letras.
Godzilla es lo que conocemos como un "kaijû", que no es un término inventado para Pacific Rim (2013), sino que da nombre propio a su género de cine. Traducido literalmente sería algo así como "bestia misteriosa".
A diferencia de EEUU, donde se usaba la técnica "stop motion", en Japón se usan trajes y maquetas a escala increíblemente detalladas, especialmente teniendo en cuenta los pocos meses con los que contaba el equipo para rodar cada película.
La idea de esta producción surge de lo mucho que gusta en Japón la película King Kong (1933), que allí es como un kaijû más de la familia. Sin embargo, el origen de la existencia de Godzilla estará relacionado íntimamente a la energía nuclear.
La primera película se estrena en 1954. Japón seguía, y aún (y con razón), con miedo a la energía nuclear tras el bombardeo de Hiroshima y Nagasaki en 1945, que de paso provoca un sentimiento anti-EEUU. Pero el miedo está aún más cerca, en ese mismo año.
El atunero Daigo Fukuryû Maru es víctima de las pruebas que EEUU estaba haciendo de su bomba de fusión (la bomba H) en el atolón Bikini, en Micronesia, para vacilarle a la URSS. La cosa se les va de las manos y acaba alcanzando mucho más territorio del previsto.
La tripulación del atunero se ve afectada de ARS por una ceniza (al parecer de coral) que les quema la piel. Uno de ellos muere. El resto lo hará después de hepatitis por culpa de las transfusiones de sangre. Toda una casualidad.
Sí, así es. Los japoneses son los únicos que han sufrido radiación en forma de bombas de fisión nuclear en Hiroshima y Nagasaki, de fusión nuclear en el Daigo Fukuryû Maru, y en la central nuclear de Fukushima Daiichi, lamentando víctimas en todos los casos.
Mezcla los conceptos de "la energía nuclear es una aberración" y "los yankees son malos" y tendremos un monstruo nuclear creado accidentalmente por EEUU con obsesión por pasearse por Japón. Es 1954. Nace Godzilla.
Cómo sería la cosa que la película es reeditada en EEUU, censurando (eliminando) las escenas donde se les critica y añadiendo otras en las que aparecen gringos como si estuvieran allí ofreciendo colaboración y demás. Cerrad la boca. Sé que en el fondo no os sorprende.
Tras el éxito indiscutible de la primera entrega, Toho se remanga y saca una segunda, "Godzilla no Gyakushû" (1955) en la que no queda claro de dónde sale ese nuevo Godzilla, pero sí que hay más kaijû como él, ya que cuenta con su primer adversario: Anguirus.
Se da el pistoletazo de salida a la primera y más lóngeva era de la franquicia. Hasta 1975 se producen la mitad de las películas de su historia. Son tantas producciones que es fácil analizar la evolución de la sociedad japonesa en estas décadas.
El imperialismo estadounidense inunda Japón y el sentimiento anti-EEUU se convierte en prácticamente lo contrario. Ahora son amigos. Podemos ver incluso cómo la moda occidental se introduce a fondo en el país.
Series como Star Trek tienen una influencia clarísima tanto estéticamente como a nivel de excusas argumentales para estirar más el chicle. De hecho, pienso que a esta etapa debería considerársela más como una serie que como un conjunto de películas.
Los humanos apenas son rivales para Godzilla, así que lo enfrentan contra varios kaijû más o menos decentes, incluyendo al propio King Kong. Godzilla es muy territorial, así es que cuando aparece otro bicharraco, siente la necesidad de ir a darle una paliza.
El presupuesto está claro que no es amplio y el guión se va desordenando, existiendo varias tramas simultáneas y mostrando un Godzilla bastante torpecillo que se va licuando de ser un terrible asesino devastador a todo un héroe del que los niños se despiden al final.
Se incluyen escenas de humor absurdo, alguna humanización gratuita, extraterrestres malvados, leyendas arcanas, y hasta una isla donde todas las excusas son pocas para explicar cómo la humanidad consigue mantener allí a los kaijû.
Pero si hablamos de niños tenemos que hablar de uno de los principales enemigos de Godzilla: Mothra. Básicamente una polilla gigante invocada por dos hadas de unos 15cm o así de una isla llamada Infant. Cambian a las actrices a cada película.
Normalmente se hacen amigas de niños y cantan una cancioncilla peligrosamente pegadiza para invocar a Mothra. Este kaijû tiene incluso su propia franquicia de películas para la TV, de corte clara y abiertamente infantil.
Otros kaijû importantes son King Ghidorah (mi favorito), Radon, Gigan o una versión super robot hecho por los humanos llamada Mechagodzilla. Muchas de las películas de Godzilla tienen los nombres de sus rivales.
A Radon se lo llama Rodan en EEUU para que no se confunda con el elemento químico número 86. En realidad es "radon" por "pteRAnoDON". Es la versión ultravitaminada de ese dinosaurio.
Hasta le sale un hijo, Minilla, que en mi opinión es la forma de distinguir las peores películas del resto. Si sale ese bicho, huid.
A Godzilla (más bien a Toho) le sale competencia. Daiei produce Daikaijû Gamera (1965) y se hace famoso con su propia franquicia y sus propios rivales. A partir de ahí, las películas de kaijû son ya un género indiscutiblemente consumado en Japón.
Godzilla y Gamera son sólo rivales comerciales. No hay ninguna película en la que se enfrenten. Quizás porque las dos empresas querrían ver ganar a su kaijû, y un empate no satisfaría a nadie. Godzilla lo habría reventado, qué queréis que os diga.
Algunos habrán visto a Ultraman peleando contra Godzilla. En realidad no es él, sino Jirass, que tiene una especie de cresta que Ultraman le arranca. Godzilla no aparece en ninguna de las series Ultra.
Por otro lado, en Godzilla tai Megalon (1973) aparece el personaje Jet Jaguar, que está muy en la línea de Ultraman y que también puede ser confundido con un crossover.
Tras un merecido parón, en 1985 aparece la primera película de la segunda era de Godzilla, y en mi opinión la más interesante argumentalmente y la más estable sobre todo porque mantiene un mejor nivel de coherencia. Mi favorita. vaya.
Se parte de que la primera y segunda película ocurrieron, pero el resto no, por lo que se reaprovechan enemigos anteriores y se le suman otros como Biollante, Destroyer, Battra (que es como un Black Mothra) o Space Godzilla.
También le sale otro hijo, al que llaman Junior, que es super cuqui. Bueno, cuando crece ya no tanto. Con tanto hijo… ¿es Godzilla en realidad hembra?
Rediseñan de nuevo a Godzilla y lo hacen más agresivo y grande con unas fauces muy detalladas. Aunque los kaijû sigan siendo trajes con gente dentro, los efectos visuales de rayos y otras cosillas comienzan a estar hechos por ordenador.
El aspecto fotográfico y artístico retorna a sus orígenes, aunque, claro está, con la tecnología de los 80. Godzilla vuelve a ser un monstruo al que hay que tener muchísimo miedo. El género del terror y el de la ciencia-ficción están más juntos que nunca
Las influencias de EEUU van tirando más hacia V, Terminator o Alien. Los estadounidenses siguen ayudando a Japón a luchar con sus científicos y militares. De hecho, hay bastantes líneas de guión habladas en inglés, incluso en personajes japoneses.
La burbuja económica japonesa está cada vez más hinchada, y esto hace que el rollito pro-EEUU sea menos evidente, y los japoneses acaben más de una vez en plan "quita que tú no sabes". Aires de primera potencia mundial envidiada por todos los países.
Hollywood nos presenta su visión de Godzilla (1998), que es básicamente un dinosaurio gigante sin chicha que usan de excusa para hacer Jurassic World en Nueva York. Una bazofia infumable que la crítica despelleja viva.
El Godzilla de TriStar es básicamente un dinosaurio muy fuerte que ha mutado y punto. Hay alguna especie de amago de su famoso aliento nuclear, pero no se puede tomar en serio. Dedos pringosos tocando lo que no se debe.
Tras esta pseudopelícula, se lanza una serie de animación de dos temporadas, que es secuela directa porque una de las crías se ve que sobrevive. Cutre, pero mejor que la película. Al menos el bicho sí tiene mal aliento.
Una excusa como el cambio de milenio no iba a quedarse sin que Tokyo acabara hecha pedazos otra vez. Comienza, de nuevo en Japón, la era "millennium" con Godzilla 2000 (que curiosamente es de 1999) con seis películas, algunas relacionadas entre sí y otras no.
Lógicamente los efectos especiales digitales mejoran, y por supuesto añaden algunos kaijû más a la familia, como Orga o Megaguirus.
Mención a Godzilla: Final Wars (2004). A Toho se le ocurre hacer un grupo de chavalería con guapura subida y armaduras futuristas muy a lo Gantz. Entiendo que querían ganarse a las nuevas generaciones, pero lo mismo se olvidaron de las demás.
Ahora toca la segunda película estadounidense, de 2014. La trama se pierda bastante, pero podemos decir que éste sí es Godzilla. El aliento, un pelín flojillo, pero vamos.
Tiene numerosos homenajes a Japón y a Godzilla que demuestran que al menos se vieron el arco del 84-95, incluido un recorte de periódico sobre el atolón Bikini que supuestamente nunca fue una prueba nuclear, sino un ataque al kaijû.
Forma parte de una nueva franquicia que pretende enfrentarlo de nuevo con King Kong. Para más información, ver la escena final tras los créditos de Kong: Skull Island (2017).
Vamos con Shin Godzilla (2016). Hideaki Anno, célebre director del anime Shin Seiki Evangelion y gran flipao psicotralla, se animó a dirigir la nueva resurrección de tan encantadora criatura. No en anime, sino con actores y CGI.
Es prácticamente un capítulo largo de Evangelion, sólo que no hay ningún Eva. Lo que sí hay es un Angel: el propio Godzilla. Incluso la estética y el ritmo, obviamente aposta, son como en la famosa serie de Gainax. Las ideas, eso sí, parten del arco de los 80.
Éxito rotundo en taquilla, muy bien hecha a nivel técnico y artístico. Demuestra lo que los japoneses pueden hacer hoy en día en lo que respecta a películas de entretenimiento. Muy premiada por la academia de cine de Japón. Película del año.
Por último tenemos una de animación estilo #celshading llamada Godzilla: Kaijû Wakusei (2017) que transcurre en el futuro y donde hay otro grupito de gente joven y guapa que se enfrenta a Godzilla para recuperar no ya Japón, sino la Tierra.
No es en absoluto una maravilla y al igual que Godzilla: Final Wars parece estar orientada al público japonés más joven. Hay previsión de convertirla en trilogía. De hecho, el final no puede ser más abierto. Ya veremos qué tal.
Como es lógico, a Godzilla se le dedican numerosos lugares en Japón que harán las delicias de quienes quieran ver al kaijû en persona. Si os pasáis por allí, quizás os interese añadirlo a vuestra ruta.
De las 30 películas (más las dos de EEUU), mis favoritas de cada era son:
- Godzilla (1954)
- Godzilla tai Hedorah (1971)
- Godzilla vs. Destroyer (1995)
- Godzilla, Mothra, King Ghidorah - Daikaijû Sôkôgeki (2001)
- Shin Godzilla (2016)
- Godzilla (1954)
- Godzilla tai Hedorah (1971)
- Godzilla vs. Destroyer (1995)
- Godzilla, Mothra, King Ghidorah - Daikaijû Sôkôgeki (2001)
- Shin Godzilla (2016)
Y hasta aquí. Muchas gracias por vuestra atención y espero que os haya gustado. FIN DEL HILO.
