Un paro general tiene sentido, a estas alturas, si, y solo si, es insurreccional. Si ese es el caso, hay que apoyarlo. Si no, se volverá un despsotivo más del caos que ha siempre usado el chavismo para devastar todas las fuerzas vivas de la sociedad. En este orden de ideas:
1) La fuerza laboral organizada en Venezuela es mucho más chica que la masa lumpen que vive de la dádivas o de la economía informal semidelincuencial, como el "bachaqueo". Así que de ir a paro, deben jugárselas duro, como jugaba Sorel y el anarco-sindicalismo. Paro cabilla, pues.
2) Los empresarios (grandes, medianos y pequeños) están en la situación más vulnerable de todas. Deben considerar si pueden sumarse o no a un paro indefinido (otro tipo de paro es ridículo o solo servirá para promocionar a algún partido político).
3) La sociedad en general debe tener una actitud de "enjambre", debilitar la estructura de gobernabilidad de la tiranía de todas las maneras que pueda. Pero para ello, no le puede "reclamar" a una autoridad que desconoce. Debe estar dispuesta a realmente desconocerla.
Si estás tres condiciones anteriores se cumplen entonces es posible un paro masivo que arrastre a sus vez a factores no civiles a sumárseles, o al menos a no reprimir a una ciudadania apaleada. De lo contrario, tal paro general solo servirá para darle más fuerzas al régimen.
Ahora bien, el elemento más importante: si la dirigencia política no está dispuesta a llegar hasta el final y, después de un gran sacrifico humano de los ciudadanos, prefiere echarse para atrás por cualquier razón, todo será más trágico aún, como ya hemos visto muchas veces.
En fin, un paro insurreccional solo tiene sentido si realmente hay una voluntad de insurrección ante el oprobio de una régimen ilegitimo. Si no, es mejor buscar otras estrategias.
"dispositivo"
