Thread by @leogarciamx

En lo que empiezo a publicar porno, esta parece una buena noche para repasar algunas ideas.

¿Las redes sociales influyen políticamente?
Si. Mucho. Más de lo que nos imaginamos.

Son la nueva plaza publica. Y funciona, pero no siempre como lo entendemos a partir de apoyos desmedidos y estruendos con hashtags.

Las interacciones en los medios digitales son un nuevo frente mediante el cual un poder puede influir en las decisiones de la gente.

En el caso específico de las redes sociales lo han logrado aprovechando las diferencias en el acuerdo social amplificando y radicalizando los discursos discordantes o en su defecto causando confusión.

No, no se trata de favorecer a alguno. Se trata de romper la civilidad. Todavía no podemos terminar de entenderlo.

El entorno social digital en particular provee del campo de acción y la materia para trabajar con gran precisión los objetivos que interesen a un poder político o social.

Ya ejemplos abundan.

La ciencia de datos analizando nuestras propias interacciones permiten un microperfilado altamente georeferenciado que da gran precisión.
Y si eso no esta a la mano, romper, romper, romper y seguir rompiendo. La confusión es la gran estrategia.

Este modelo funciona para incentivar acción, o para inhibirla. O si. No solo se trata de hacer propaganda para salir corriendo a hacer algo. También sirve para promover la idea de NO hacer algo.

¿Ejemplos? Para el caso del brexit, la campaña en medios digitales fue en dos frentes con dos mensajes muy simples: "Leave EU" y "Remain EU" (“Dejar la Unión Europea” y “Permanecer en la Unión Europea”).

Si lo medimos como tendencia, la campaña "Leave" fue 5 veces mayor que la campaña "Remain". La campaña “Leave EU” tuvo 2 frentes principalmente que se manejó con una estrategia claramente segmentada. A los menores de 25 a 30 años de edad los disuadieron de ir a votar.

En cambio también en la campaña “Leave EU” para el segmento de edad 45 a 60 años y más el esfuerzo fue considerablemente mayor. Y es justo ahí donde se definió la votación.

En Estados Unidos durante la campaña presidencial de 2016 fue especialmente intenso el uso de las redes sociales, principalmente Facebook, Twitter y Reddit.

Las interacciones predominantes eran para amplificar la división social con mensajes de racismo, malestar económico y migración. Las bases de la campaña de Donald Trump precisamente.

La división social impulsada mediante las interacciones de las redes sociales vino, por un lado en apoyo explícito a Donald Trump y por el otro en abiertos ataques contra Hillary Clinton.

Construir una narrativa para una audiencia ya dividida pero lista para recibirla sin cuestionarla aprovechando el clima social no se hace con el fin explícito de favorecer a uno u a otro. Más bien, se busca crear confusión y agravar los problemas existentes.

El método pasa por desinformar, causar confusión, y reducir la confiabilidad en los medios tradicionales. La duda en medios tradicionales potencia el manejo de los llamados "medios alternativos".

El problema es que los medios alternativos suelen ser medios con agenda clara y específica como esa que dicen combatir justamente.

Se busca influenciar a los políticos, líderes, instituciones, responsables de la toma de decisiones y elementos sociales combinando el uso de la presión social con narrativas convenientes.

Los nuevos "ejércitos" no son hombres armados listos para entrar al campo de conflicto, ahora lo son operadores perfectamente capacitados para irrumpir en las interacciones digitales donde incluso puede ser de mayor utilidad causar enojo y discordia.

¿En serio alguien puede seguir creyendo que México es la excepción?

Cuando la tecnología que forma al medio social digital se creó sus dueños y fundadores no pensaron que un poder extranjero tendría la posibilidad de usarla para influir más allá de sus fronteras. Mucho de eso es lo que va en la investigación del rusiagate.

Twitter ha reconocido el uso de su plataforma con estos fines.
Facebook/Instagram/Whatsapp también.

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