1. En estos últimos tres días, López ha hecho evidente varias cosas: Su nulo contacto con la realidad, su absoluto desprecio a la disidencia, y su valemadrismo contra la integridad física de militares y periodistas. Chequen la situación...
2. Se reveló el nombre del militar a cargo del desastroso operativo en Culiacán, que culminó con el gobierno rendido ante el Cártel de Sinaloa. A López se le cuestionó que se revelara el nombre, porque eso exponía a dicho militar y a su familia. Y el tipejo contestó que...
3. "El que nada debe, nada teme". Vaya desconexión de la realidad. Nunca se trató de que dicho militar esté en riesgo de ser procesado o juzgado. Menos aún su familia. El riesgo es que el crimen organizado lo ataque o los ataque. López, como siempre, ni en cuenta.
4. Pero cuando se le preguntó sobre el nombre del miembro del gabinete de seguridad que dio la orden de detener el operativo y liberar a Ovidio Guzmán, López contestó que no es necesario dar nombres. Punto. Con ello, nuestro miserable presidente demostró que...
5. No tiene el mínimo respeto o interés por la vida de los militares que no son de su círculo más cercano, y los puede sacrificar, exponiéndolos a cualquier cosa. Pero a sus fieles los va a proteger incondicionalmente. Eso no es un presidente. Es un gángster.
6. A los periodistas no les fue mejor. La última vez que se abordó el tema del operativo en Culiacán, ahora sí se le treparon, lo acorralaron y lo exhibieron cual mentiroso, ignorante y zafio que es. López perdió el control en su conferencia matutina, y se lució...
7. Usó una expresión de lo más deleznable: "Muerden la mano que les quitó el bozal". En primera, porque con ello asume que si hay libertad de expresión es gracias a él. Algo completamente falso. En segunda, por la odiosa comparación. Aunque en su cabecita tiene lógica...
8. Para López, los periodistas son perros. Mascotas que hay que alimentar. Y tiene esa idea gracias al servilismo de mierda que tiene en personajes como Carlos Pozos (#LordMolecula) o @FedericoArreola. Obvio, alguien le habrá notificado de su error y hoy quiso corregir.
9. Pero, delirante como siempre, López complicó más las cosas: Dijo que no tuvo la intención de comparar a los periodistas con "animales", porque respeta mucho ¡A los animales! De ese tamaño es la bajeza de mi presidente, el peor que hayamos tenido en México.
10. México es un país en donde el periodismo está expuesto, como nunca, a la violencia. El sexenio de Peña Nieto fueron asesinados 47 periodistas. Un promedio de 2 periodistas cada 3 meses. El más alto que se hubiera tenido hasta 2018. Pero López está rompiendo los récords.
11. En diciembre de 2018, al inicio del sexenio de López, asesinaron dos periodistas. Para finales de agosto, se contabilizaban 12 periodistas asesinados durante 2019. Es decir, 14 en los 9 meses que llevaba López en el poder. Un promedio sin precedentes.
12. Eso hace de México un país muy peligroso para periodistas. Y en ese contexto, López dice: "No quise comparar a los periodistas con perros; respeto mucho a los perros". En manos de este sujeto nos pusieron 30 millones de mexicanos ingenuos o idiotas. O ambas cosas.
