"De tí puedo fiarme, eres el mejor hombre que conozco. Que no les pase nada"
"Eres tú el que tienes que irte. Vendrán a por tí en cualquier momento".
Y aunque no llegó a cumplir los 12 años de prisión, Crescencio pasó el resto de sus días cumpliendo con la revisión mensual. Como si no bastara, en la documentación aún había sarcasmos como éste:
"La junta de disciplina de esta prisión, así como las autoridades superiores y las de la provincia en que va a residir SE INTERESAN VIVAMENTE POR SU SUERTE, podrá contar CON LA AYUDA YCONSEJO de dichas autoridades y de esta Junta y en esta prisión hallará siempre...