Pues me estoy acabando la biografía de Carlos I (V de Alemania) y os digo una cosa: menuda mierda de vida. Se tiró el hombre toda ella de acá para allá, cuando no había Ryanair, con el pequeño detalle de tener a Francia entre medias de sus dominios. Y pidiendo dinero.
No le cambio yo mi vida a un emperador del siglo XVI ni cobrando.
Un dato interesante es que como las movidas gordas las tenía en Italia, Alemania o Países Bajos paraba poco en España, que era donde quería estar. Por el camino, se le mueren hijos, se le muere la emperatriz, va enfermando ... España, como quien dice, se administraba solita.
Eso sí, a España le costó el rollo imperial un dinero que no tenía. Especialmente a la Corona de Castilla.Nos habría ido mejor si no hubiera sido V de Alemania. Al menos los Tercios hicieron turismo, porque como eran la creme de la creme de la época los metía en todos los fregaos
El ejército imperial era un poco como el equipo del Barça pero los Tercios - siempre minoría - eran Messi. Un Messi que duró más de un siglo ganando el Arcabuz de Oro.
El problema es que como la Champions no pagaba por entonces por la retrasmisiones cada guerra donde nos metíamos costaba un ojo de la cara, la mayor parte de ellas por gentileza de mon ami Francisco I o los turcos. Que tenían bastante más recursos económicos y demográficos.
Los franceses y los turcos, por cierto, fueron aliados en muchos momentos contra nosotros. Que si se trataba de darnos por culo lo del tema religioso y tal no importaba tanto. Hasta el mismo Papa hacía sus piruetas según soplaba el viento. En fin, tiempos interesantes.
La emperatirz, que se quedó muchas veces de regente con los viajes de negocios del marido, hizo mucho y bueno. Creo que la recordamos menos de lo que se merece: Isabel de Portugal. A ella está dedicado uno de mis cuadros favoritos del Prado. Este:
museodelprado.es/coleccion/obra…
museodelprado.es/coleccion/obra…
Abrid el enlace y leed la descripción. Es muy conmovedor.
Un último detalle llamativo era que la mayoría de las familias reinantes estaban emparentadas entre sí. Los hijos eran piezas del juego diplomático. Y eso no evitaba las guerras entre parientes aunque solía ayudar en su solución.
Es largo de contar, pero entre hermanos, hijos, tíos y cuñados de Carlos I te sale un Austria reinante en casi cualquier país de Europa. Luego que si la consanguinidad.
En fin, leed historia. Suele ser mejor que las novelas y más educativo.
Aaaaaaaaaaaaaaaadiós 👋🏻
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