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Wow. El Wall Street Journal acaba de publicar un reportaje terrorífico sobre la información que las apps comparten con Facebook:
Si utilizas determinadas aplicaciones Facebook puede saber cual es tu ritmo cardiaco, donde estás buscando casa e incluso cuando ovulas.
Si utilizas determinadas aplicaciones Facebook puede saber cual es tu ritmo cardiaco, donde estás buscando casa e incluso cuando ovulas.
El @WSJ ha demostrado lo que se confirmó en el informe del Parlamento Británico presentado esta semana: que las aplicaciones comparten todo tipo de datos con Facebook, por muy íntimos que sean.
wsj.com/articles/you-g…
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Los periodistas explican, por ejemplo, como la aplicación Flo (que ayuda a las mujeres a controlar su periodo) comparte esta información con Facebook.
Si la usuaria está registrada en la red social Facebook puede enlazar la información que le proporciona Flo con su perfil.
Si la usuaria está registrada en la red social Facebook puede enlazar la información que le proporciona Flo con su perfil.
Flo tiene más de 70 millones de usuarias en el mundo que indican en la app cuando ovulan y si tienen intención de quedarse embarazadas.
Facebook tiene acceso a esa información aunque las usuarias no tengan un perfil en su plataforma.
Facebook tiene acceso a esa información aunque las usuarias no tengan un perfil en su plataforma.
Lo mismo ocurre con HR Monitor, que envía la información del ritmo cardiaco de más de 100 millones de usuarios a Facebook.
Facebook recibe de la app de Realtor la información de más de 10 millones de usuarios. Sabe donde han buscado piso, que precio barajan y cuales han marcado como favoritos.
En ninguna de estas aplicaciones se informa de que esta información es compartida con Facebook ni se puede evitar que se comparta.
Facebook defiende que esa información no se usa para nada y que gran parte se borra pero ¿Cómo podemos saber si es cierto? Los precedentes no ayudan a darles mucha credibilidad.
Ante estas revelaciones, el informe del parlamento británico y sus conclusiones sobre regulación cobran más importancia que nunca:
