Hilo: La práctica totalidad de los gobiernos de Sudamérica que reconocieron al golpista Guaidó como Presidente encargado de Venezuela están inmersos en graves crisis económicas e institucionales. Todos tratan de callar las protestas internas por medio de la represión más brutal.
La UE, los gobiernos de sus estados miembros y los grandes medios, tan propensos a condenar y exigir condenas, miran para otro lado ante las violaciones de DDHH de los gobiernos que se alinean con la agenda neoliberal al servicio de los grandes intereses económicos occidentales.
Ningún “periodista” exigirá condenas a nuestros líderes políticos por la represión que ha causado centenares de muertos (como poco) en todos esos países en 2019. Solo interesan las condenas por las actuaciones del gobierno venezolano.
Ningún gobierno de la UE facilitará ayuda humanitaria a sus aliados latinoamericanos para paliar las consecuencias de las políticas económicas que se imponen a sus habitantes. La ayuda humanitaria solo se proporciona si se quiere cambiar un gobierno, y estos son fieles vasallos.
Y ningún artista, supuestamente conmovido por las consecuencias que la crisis provocada por estas criminales políticas acarrea a la población, organizará conciertos para recaudar fondos que ayuden a contrarrestar sus efectos por las mismas razones.
Vivimos en el reino del mundo al revés. Un mundo en el que la información brilla por su ausencia, análisis es sinónimo de anal porque se utiliza para dar por el culo a tus enemigos y solo la propaganda más burda tiene cabida en los grandes medios.
Vivimos en el mundo de las “democracias consolidadas”.
