(abro hilo)
Dicen por ahí, que uno no elige a los libros, sino que los libros lo seleccionan a uno en el momento justo. No sé si ello tenga algo de cierto, pero por si las dudas, he decidido contarles que
Tocan al timbre de mi departamento. Abro con precaución, porque ya es algo tarde. Un cartero perfectamente ataviado me entrega un telegrama.
Lo hemos observado por años. Este es el llamado.
Si acepta, será iniciado en nuestros augustos misterios. 10pm. Calle artículo 123. No. 6. Interior F. Sea discreto.
Atentamente.
1111.
Faltan, curiosa y exactamente, once segundos para que den las 10 de la noche.
¿Qué coños pasa?, me cuestiono en silencio y luego pregunto con cierta precaución:
— ¿Es una broma? ¿De qué se trata? ¿Qué es todo esto?
—Muchas, es cierto.— respondí
—¿Eh?
—Por ello os hemos buscado —me revelan varias voces—. ¿Perteneceréis?
Hasta aquí llega el manuscrito que he encontrado.
¿Y si investigo más al respecto? ¿Ustedes que harían?