, 54 tweets, 17 min read
My Authors
Read all threads
“Al igual que los perros, estos zorros buscan contacto con las personas que les resultan familiares, tienden a acercarse a ellos y les lamen manos y cara”, escribió Dmitri Belyaev cuando estaba llevando a cabo un experimento para comprender los procesos de domesticación.
Sus anotaciones corresponden a 1979, sólo habían pasado 10 generaciones desde que iniciase su experimento con zorros. Se había concentrado en conseguir reducir el miedo de los animales a los humanos.
Poco antes, en 1958 Dmitri Belyaev había aceptado una posición en la ciudad de la ciencia soviética Akademgorok, cerca de Novosibirsk, Siberia. Enseguida se le uniría Lyudmila Trut, una chica por entonces que apenas había acabado sus estudios de Biología.
“Me explicó que quería hacer un perro a partir de un zorro”, explicó hace unos años rememorando su primer encuentro. Dmitri no sólo le previno de los riesgos de trabajar con zorros, y de desplazarse al corazón de Siberia, sino de que iban a hacer un experimento de genética.
Pocos años antes había muerto Stalin, pero Trofim Lysenko seguía manteniendo su posición con el apoyo de Nikita Khrushchev. Lysenko unas décadas antes había conseguido que oficialmente se rechazasen las ideas de la genética Mendeliana.
En la Unión Soviética de Stalin estaban prohibidos los estudios genéticos que pudiesen validar las ideas Mendelianas y la herencia de caracteres. Uno más de los ejemplos en los que la política irrumpe y altera el conocimiento científico.
Lysenko y su gran influencia en el Partido Comunista consiguió que la genética fuese catalogada como “ciencia fascista”, por el uso que los nazis habían hecho de las idas de raza, herencia y su política eugenésica.
Una filosofía social que defendía la mejora de los rasgos hereditarios de sus sociedades mediante métodos selectivos, en los que el estado intervenía seleccionando quién podía y quien no podía reproducirse. Incluía la esterilización forzada e incluso el genocidio.
Era lo que en muchos países se conocía como “higiene racial”, aunque los nazis lo llevaron al extremo sus políticas se llevaron a cabo en Estados Unidos, Canada, Suecia, Australia, Reino Unido, Noruega, Francia, Finlandia, Dinamarca, Suiza…
Vamos que las esterilizaciones forzadas de aquellos grupos o individuos que consideraban inferiores fueron comunes en muchos países de los autodenominados “civilizados”. El horror nazi fue el mayor monstruo de esta filosofía.
La eugenesia seguía las ideas de la selección artificial, antes incluso del descubrimiento de las leyes de la genética Mendeliana. En la mente de muchos la genética quedó asociada a estos movimientos político-sociales.
Así fue en la Unión Soviética, hasta el punto, de que a mediado de la década de 1930 varios genetistas rusos, entonces los mejores, fueron enviados a campos de trabajo. En 1948, la genética fue declarada oficialmente como una pseudociencia.
Trabajar en temas relacionados con la genética en la Unión Soviética en aquella época suponía un gran riesgo, pero Dmitri Belyaev estaba dispuesto a asumirlo. Años antes había perdido su trabajo en el departamento de Cría de Animales Peleteros en Moscú.
Cuando pidió subvención para su experimento de los zorros en Siberia lo describió como un estudio de fisiología. Dmitri pudo así arrancar así su experimento de genética en compañía de Lyudmila Trut.
El objetivo de Belyaev era llegar a comprender el proceso de domesticación de las especies. Quería saber cómo del lobo se había conseguido dar lugar al perro. Tenía una hipótesis: el comportamiento era el factor crítico.
Belyaev creía que seleccionando y cruzando animales mansos, los cambios anatómicos y fisiológicos observados en los animales domesticados surgirían de manera indirecta.
Se preguntó si al escoger a los animales más dóciles, evitando los más agresivos, acabaría dando lugar a que cambios hormonales y neuroquímicos responsable de la conducta implicasen también cambios en la anatomía.
Para ello diseñó el experimento que llevó a cabo con zorros plateados, una variante del Zorro común (Vulpes vulpes) de tonos grises muy apreciados por el comercio peletero.
En sus instalaciones siberianas, Dmitri y Lyudmila se dedicaron a seleccionar zorros durante generaciones. Para ello, empezando cuando tenían un mes, estudiaban cada mes las reacciones de los individuos ante los humanos u otros zorros.
Al alcanzar la madurez sexual, a los 7 u 8 meses, les hacían una última prueba en la que medían la tendencia del zorro a morder al experimentador cuando lo intentaban tocar. Así los clasificaban en agresivos y dóciles.
En cada generación menos del 20% de los zorros eran seleccionados por ser mansos y se les permitía cruzarse. Al mismo tiempo hizo otra línea con los individuos más agresivos.
Para asegurarse que la docilidad de los animales eran resultado genético y no del adiestramiento y de costumbre a los humanos, los zorros no fueron entrenados y apenas tenían contacto con los encargados de llevar a cabo el experimento.
El resultado de estos cruces seleccionados, a las 10 generaciones ya había dado animales dóciles según el propio Belyaev. Pasadas 40 generaciones había conseguido unos zorros domesticados mansos con las personas.
Los zorros plateados de Belyaev estaban ansiosos por tener contacto con los humanos, gemían para llamar su atención, olisqueaban y lamían a sus cuidadores cuando estos se dejaban. Una conducta familiar, ¿no?
Parecía que Belyaev había conseguido lo que le había dicho a Lyudmila años antes, había conseguido crear un perro a partir de un zorro. Pero la conducta no era lo único que había cambiado en los zorros.
Muchos de los zorros domesticados tenían las orejas flexibles y caídas, unas colas más cortas, rizadas hacía arriba, habían sufrido cambios en la coloración de su pelaje, en la forma del cráneo, mandíbula y dientes.
Como había pensado, al seleccionar a los animales en función a su conducta había obtenidos animales con una morfología y una fisiología distinta. En el eje hipotalámico-pituitario-adrenal, observó que tenían niveles de adrenalina más bajos.
Sus estudios han permitido explorar la genética y la evolución de la conducta relacionada con los cambios fisiológicos y los anatómicos. Como si todos los cambios que sufre una animal durante su domesticación fuesen en un pack.
Belyaev y otros investigadores que han seguidos sus trabajos han sugerido, igual que hizo Charles Darwin, que los animales domesticados comparten una serie de caracteres, lo que se conoce como “síndrome de domesticación”.
Los rasgos que forman parte del “paquete” del síndrome de domesticación son la docilidad, las orejas caídas, manchas de piel blanca, caras juveniles con morros cortos y mandíbulas pequeñas.
No hace mucho, investigadores de la Universidad de Humboldt en Berlín y de la diversidad de Harvard y de Viena propusieron una explicación a que todos los rasgos surgieran de manera conjunta.
royalsocietypublishing.org/doi/full/10.10…
Todo se debería a cambios en el grupo de células madre embrionarias conocidas como cresta neural, que dan lugar a la médula espinal de los embriones de los vertebrados.
A medida que se desarrolla el embrión estas células migran y dan lugar a distintas partes del cuerpo, formando tejidos que forman parte del cráneo, las mandíbulas, los dientes y las orejas. Parece que todo encaja, ¿no?
Según estos autores, los animales domesticados podrían presentar problemas en el desarrollo de la cresta neural, porque los humanos inadvertidamente hayan seleccionado individuos con estas deficiencias basándose en su conducta.
El trabajo parecía apoyar el experimento llevado a cabo durante más de medio siglo por los investigadores rusos, pero un estudio publicado este mes cuestiona puntos del trabajo clásico de Belyaev y el síndrome de domesticación.
El experimento de Belyaev con su “granja” de zorros plateados es muy famoso, pero poco se sabe del origen de los zorros que utilizó para los experimentos. La pregunta surgió en 2015 cuando Raymon Coppinger visitó el Fox Museum International.
Un pequeño museo en Canada sobre las granjas peleteras de zorro durante el siglo XIX en la provincia que llamó su atención. Allí vio fotos de zorros manchados que le recordaron a los zorros de Belyaev.
Los estudios genéticos de los zorros plateados de Belyaev han demostrado que su origen se encuentra en el este de Canada, de la isla Prince Edward donde en su momento hubo una gran industria peletera.
¿Cuánta domesticación había tenido lugar antes de que se iniciase el famoso experimento? De hecho el propio Belyaev había declarado abiertamente que sus zorros provenían de granjas.
Anna Kukekova, una genetista que investiga la genética de los zorros rusos y que ha colaborado con Luydminla Trut, ha reconocido que antes del experimento se debió producir cierta domesticación.
Los primeros criadores de la isla de Prince Edward empezaron capturando zorros plateados de la naturaleza por su pelaje oscuro, pues sus pieles eran las más valoradas y preciadas, vendiéndose a un buen precio.
Durante años, hasta la década de 1920 la industria peletera de zorros plateados gozó de un gran éxito económico, por lo cual se debieron criar muchos individuos. En el museo del zorro de la isla hay fotos antiguas de zorros con humanos.
Se les ve cómodos, nada agresivos. Un artículo de 1921 del “Black Fox Magazine” para gente que quería hacer fortuna criando zorros por sus pieles, describe a zorros de compañía en chicas de la ciudad.
El nuevo estudio no cuestiona los trabajos rusos pero sí el uso del término “síndrome de domesticación”, que aunque Belyaev no lo uso nunca estaba explícito en sus escritos y conclusiones.
cell.com/trends/ecology…
En la nueva revisión al revisar otros artículos que definían el síndrome de domesticación se han dado cuenta de que no había un sólo rasgo que se incluyera en todas las definiciones. No todos los rasgos se dan en todas las especies.
Las distintas especies muestran diferentes combinaciones de los rasgos que se supone forman parte del síndrome, con lo cual ponen en duda que exista un conjunto universal de rasgos que caracteriza a todos los animales domesticados.
Los hallazgos del estudio no cuestionan que Belyaev y Trut consiguieron crean un patrón de comportamiento diferente al de los zorros de granja con los que empezó, pero ha conseguido levantar ampollas entre muchos estudiosos de la domesticación.
Cuestionan que el pequeño grupo de zorros con los que inició el experimento hizo posible que durante el mismo se fijasen una serie de caracteres por puro azar, como hace la deriva genética en la naturaleza.
De esta manera cuestionan los límites del experimento de los zorros plateados como modelo o ejemplo de domesticación. Van incluso un paso más allá y se plantean en qué momento podemos decir que una población está domesticada.
El trabajo critica que el trabajo de los zorros plateados se ha sobrevalorado a la hora de ayudarnos a entender los mecanismos de domesticación, de hecho los autores rechazan directamente la idea del síndrome de domesticación.
A cambio proponen que se entienda se estudie la domesticación como las adaptaciones que han sufrido los animales a los ambientes humanos, reduciendo su respuesta de huida, reproduciéndose cerca de los asentamientos humanos,…
…, utilizando recursos alimentarios distintos asociados a los ambientes humanos. Las adaptaciones de las especies serán distintas entre especies, pero la presión selectiva es similar en todas ellas.
Los autores claman que en lugar de poner el foco en el síndrome de domesticación se haga en cómo las especies han cambiado y siguen cambiando en respuesta a los ambientes modificados por los humanos.
¡¡Muchas gracias si habéis conseguido llegar hasta aquí abajo!!
Missing some Tweet in this thread? You can try to force a refresh.

Enjoying this thread?

Keep Current with Alex Richter-Boix

Profile picture

Stay in touch and get notified when new unrolls are available from this author!

Read all threads

This Thread may be Removed Anytime!

Twitter may remove this content at anytime, convert it as a PDF, save and print for later use!

Try unrolling a thread yourself!

how to unroll video

1) Follow Thread Reader App on Twitter so you can easily mention us!

2) Go to a Twitter thread (series of Tweets by the same owner) and mention us with a keyword "unroll" @threadreaderapp unroll

You can practice here first or read more on our help page!

Follow Us on Twitter!

Did Thread Reader help you today?

Support us! We are indie developers!


This site is made by just three indie developers on a laptop doing marketing, support and development! Read more about the story.

Become a Premium Member ($3.00/month or $30.00/year) and get exclusive features!

Become Premium

Too expensive? Make a small donation by buying us coffee ($5) or help with server cost ($10)

Donate via Paypal Become our Patreon

Thank you for your support!