Mirad lo que se puede llegar a hacer con un simple círculo: desatar la locura.
Pasen y vean esta maravilla de la arquitectura renacentista. Y no, no nos vamos a Italia. Nos vamos a Francia.
Abro mini-hilo:
Pasen y vean esta maravilla de la arquitectura renacentista. Y no, no nos vamos a Italia. Nos vamos a Francia.
Abro mini-hilo:
En 1547, el rey francés Enrique II regalaba el extraño y magnífico Château d'Anet a su adorada Diana de Poitiers, su Diana Cazadora particular.
Tal gesto de amor terminó alojando una de las construcciones más epatantes de la historia del arte: su capilla.
Tal gesto de amor terminó alojando una de las construcciones más epatantes de la historia del arte: su capilla.
El arquitecto encargado el proyecto (1547-1552) fue Philibert de l'Orme. Su punto de partida, el círculo.
Y es que ya sabemos que el círculo es la más perfecta representación de Dios por contener en sí mismo la infinitud, ni principio ni final.
Y es que ya sabemos que el círculo es la más perfecta representación de Dios por contener en sí mismo la infinitud, ni principio ni final.
Bramante lo sabía al diseñar San Pietro in Montorio (1502). Su concepción, armonía y equilibrio le valieron ser contado entre las antigüedades romanas según Serlio en su Terzo Libro di Architettura (Venecia,1540).
¿Y qué es el Tempietto?
Un círculo.
Un cilindro.
Una esfera.
¿Y qué es el Tempietto?
Un círculo.
Un cilindro.
Una esfera.
Philibert de l'Orme decidió prescindir de la pureza bramantesca y apostar por un "tour de force" que dejara boquiabiertos a las generaciones presentes y futuras.
Diseña una planta circular con capillas laterales curvas que, al exterior, sólo se ven rotas por las sacristías.
Diseña una planta circular con capillas laterales curvas que, al exterior, sólo se ven rotas por las sacristías.
Pero donde alardea de técnica e inventiva es en el interior. Los arcos sobre los que descansa la cúpula describen a su vez la curva del cilindro interior, son arcos en tres dimensiones.
Chúpate esa, Borromini.
Chúpate esa, Borromini.
Por si no nos queda claro que es el rey de la composición curva, traza el artesonado de casetones de la bóveda en una composición que casi podríamos llamar fractal.
Tiene en mente la cúpula del panteón pero le han echado algo en la bebida, no hay duda.
¡Y aún hay más!
Tiene en mente la cúpula del panteón pero le han echado algo en la bebida, no hay duda.
¡Y aún hay más!
Como si la luz que entra por la linterna tuviera la facultad de materializarse, el diseño de los casetones de la cúpula se repite en el pavimento de mármol blanco y negro a nuestros pies.
Las únicas líneas rectas son las de los pilares, el resto es curva, curva, curva.
¿No os sentís como una voluta de humo ascendiendo a la divinidad?
¿No os sentís como una voluta de humo ascendiendo a la divinidad?
